La estrategia electoral en la provincia de Buenos Aires se recalienta con el avance del calendario hacia los comicios del 7 de septiembre. En medio de tensiones internas en el peronismo y un intento de recomposición entre Axel Kicillof y Cristina Kirchner, se evalúan mecanismos no convencionales para reforzar el posicionamiento territorial del oficialismo. Una de las maniobras que más ruido genera es la posibilidad de que varios intendentes alineados con el gobernador se postulen como candidatos testimoniales a concejales. “Puede ser. Lo planteó primero Mussi. Nos cambian el sistema electoral y se desdobla todo. Nunca tuvimos una elección sin lista provincial que traccione”, reconoció un jefe comunal del oficialismo. Desde el espacio “Movimiento Derecho al Futuro”, que promueve Kicillof, aseguran que ya se han presentado listas en las ocho secciones electorales, solicitando a los intendentes que encabecen las nóminas locales. El objetivo: reforzar la presencia territorial ante una elección fragmentada. Mario Secco, jefe comunal de Ensenada, fue uno de los primeros en admitir públicamente que podría ir como testimonial. “Se instalan, la gente los conoce”, valoró un referente del Frente Renovador, destacando la importancia de las “caras conocidas” en la tradicional boleta partidaria, dado que no se utilizará boleta única de papel a nivel provincial. Otra herramienta en evaluación es la reapertura del sistema de listas colectoras, prohibido desde 2019 por un decreto de María Eugenia Vidal. Para reactivarlo, Kicillof debería derogar esa norma. Aunque algunos sectores del PJ confían en que así será, otros —incluso dentro del oficialismo— creen que el gobernador no avanzará si logra una unidad con Cristina Kirchner sin necesidad de esa herramienta. El tercer factor que se discute con fuerza es la implementación de boletas en blanco y negro. Aunque la justificación oficial sería la reducción de costos de impresión, en la arena política se lee como una movida para neutralizar el color violeta característico de La Libertad Avanza. “Nos viene joya”, admitió un dirigente cercano a Kicillof. Desde Pro, acusan: “Es una chicana del PJ contra Milei”. La definición final sobre este punto podría conocerse el próximo lunes, cuando se reúna la Junta Electoral bonaerense. Si se aprueba, las boletas sin color podrían alterar la percepción visual del votante y nivelar simbólicamente la competencia. En medio de este tablero en movimiento, un dirigente de Pro advirtió: “Por primera vez, todos van a querer estar en las legislativas. Cristina será candidata a diputada provincial, y eso va a atraer a muchos”. Así, el atractivo de las cabezas de lista en las ocho secciones se convierte en otra disputa clave de este proceso electoral inédito. Redacción del Diario NORTE HOY