San Pedro

Gabriel Cabral deja la Secretaría de Seguridad y el Municipio apura la designación de un nuevo titular

#San Pedro El comisario retirado Gabriel Cabral comunicó su salida de la Secretaría de Seguridad de San Pedro a partir del 1 de julio. El Gobierno local ya entrevista candidatos para cubrir un área clave, mientras crece la expectativa por la continuidad de la política de control del delito.

  • 24/06/2025 • 10:44

El subsecretario de Seguridad de San Pedro, Gabriel Cabral, anunció su renuncia y dejará su cargo el próximo 1 de julio. La decisión fue comunicada la semana pasada a las autoridades municipales, antes del fin de semana largo, y obedece a nuevas responsabilidades laborales en el sector privado.

Cabral, comisario retirado de la Policía de San Nicolás, había asumido inicialmente como subsecretario junto a Carlos Farré, designado por recomendación del gobernador Axel Kicillof y su ministro Javier Alonso para encabezar la Secretaría de Seguridad con un perfil civil, como exige la gestión provincial para los municipios aliados.

La posterior salida de Farré —quien regresó a tareas en el Gobierno porteño, vinculado al PRO— dejó a Cabral al mando de la cartera de forma interina, rol que mantuvo hasta ahora. Durante su gestión conjunta, ambos lograron reforzar la presencia policial, articular operativos con la UTOI y coordinar acciones rápidas con la Justicia para responder a la demanda vecinal de mayor seguridad.

Con la salida de Cabral, el intendente Cecilio Salazar y su equipo de gabinete se ven obligados a acelerar la designación de un nuevo responsable. Según trascendió, este lunes se esperaba una entrevista con un candidato, aunque por el momento su identidad se mantiene bajo reserva.

Fuentes oficiales consultadas indicaron que el objetivo es sostener la línea de trabajo lograda hasta ahora y evitar retrocesos en los índices de prevención del delito que, según destacan desde el Municipio, mostraron mejoras desde el cambio de mando.

Diario NORTE HOY

Opinión pública: la experiencia de los últimos meses deja claro que la política de seguridad exige continuidad técnica y respaldo político firme. La comunidad espera que la transición no implique un retroceso en la respuesta estatal frente a los delitos que preocupan a diario a los vecinos.