Una nueva encuesta realizada en el municipio de Avellaneda volvió a poner bajo la lupa la interna más tensa del peronismo: la que enfrenta a Axel Kicillof con Cristina Kirchner. El estudio, encargado por el intendente Jorge Ferraresi y llevado adelante por la consultora PxQ —dirigida por el economista Emmanuel Álvarez Agis—, expone datos que podrían reconfigurar el equilibrio de poder en la Tercera Sección Electoral. Con 900 casos relevados a fines de mayo y un margen de error de +/- 3,3%, el trabajo se concentró en analizar las percepciones políticas de los votantes de Unión por la Patria en uno de los distritos clave del conurbano bonaerense. Y los resultados son reveladores: en la disputa entre Cristina y Kicillof, el gobernador logra mayor respaldo y emerge como la figura con mayor proyección entre el electorado local. ¿Quién frena a quién? Uno de los interrogantes más punzantes del relevamiento fue el siguiente: "¿Kicillof traicionó a Cristina o Cristina no lo deja crecer?". En la respuesta, los vecinos de Avellaneda parecen tener una postura clara: solo el 11% cree que el mandatario traicionó a la expresidenta, mientras que un 36% considera que es ella quien no le permite desarrollarse políticamente. Visto desde el otro ángulo, el 56% de los encuestados rechaza la idea de que Kicillof haya actuado con deslealtad, y el 37% también disiente con la idea de que Cristina lo frene. De todos modos, el impacto simbólico es fuerte: es la primera vez que, incluso entre votantes propios, se instala la posibilidad de que el liderazgo de Cristina esté en declive frente a una figura en ascenso. Paridad en imagen, pero liderazgo para ella Respecto a las imágenes públicas, Kicillof y Cristina Kirchner se mantienen parejos: ambos tienen una imagen positiva del 44%, aunque el gobernador supera levemente a la exmandataria en términos de imagen negativa (49% contra 50%). Sin embargo, cuando se pregunta por el liderazgo opositor, Cristina todavía mantiene una ventaja: 37% de los consultados la ubica como la principal referente, contra el 23% que se inclina por Kicillof. El resto de los dirigentes aparece con porcentajes marginales, e incluso un 29% dice no tener una referencia clara. Ferraresi, el intendente que toma partido La difusión de este estudio no es inocente. Jorge Ferraresi, intendente de Avellaneda y durante años alineado con Cristina, ahora juega abiertamente a favor de Kicillof en la interna. Su buena imagen local —por encima incluso del gobernador y del presidente Javier Milei— le permite actuar como articulador del “kicillofismo” en el sur del conurbano. En una provincia donde el PJ sigue siendo la primera minoría, pero atraviesa una de sus peores crisis de conducción, el reposicionamiento de Kicillof no es un dato menor: podría marcar el fin de una era en el kirchnerismo. ¿Cambio de ciclo? Más allá de los números, lo que deja entrever la encuesta es una fatiga del liderazgo tradicional. En los barrios del conurbano profundo, donde el nombre de Cristina era sinónimo de lealtad política, hoy empieza a ganar lugar una narrativa distinta: la de un dirigente joven, con gestión propia, y que empieza a correr el cerco de la centralidad política. Si esta tendencia se consolida, Kicillof podría emerger como el nuevo eje articulador del peronismo bonaerense. Con el respaldo de intendentes y una buena base electoral, ya no parece tan lejana la idea de que sea él quien dispute el liderazgo nacional del espacio. Redacción del Diario NORTE HOY