En una jugada que reafirma la creciente sintonía entre el presidente Javier Milei y el mandatario francés Emmanuel Macron, la Argentina da pasos firmes para consolidar una alianza estratégica con Francia centrada en dos ejes fundamentales: la cooperación militar y la explotación de minerales críticos. En los últimos días, Buenos Aires y París avanzaron en simultáneo. Por un lado, se firmó un memorándum de entendimiento en materia de minerales estratégicos, con foco en recursos como el litio, cobre y cobalto, piezas claves para la transición energética mundial. Por otro, en la capital francesa, el ministro de Defensa argentino, Luis Petri, sostuvo reuniones de alto nivel con su par Sébastien Lecornu para profundizar la cooperación bilateral y evaluar la inserción argentina como socio global de la OTAN. Este acercamiento refleja la voluntad del Gobierno de potenciar la llegada de inversiones francesas —que en 2024 crecieron un 43%, alcanzando los 7.600 millones de dólares— y fortalecer la presencia argentina en plataformas multilaterales de seguridad. En este sentido, la posible integración de la Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA) como proveedor para Airbus abre una puerta a la modernización tecnológica y a la expansión industrial regional. Desde la Secretaría de Minería, destacaron que el acuerdo con Francia establece una "hoja de ruta" para convertir al sector minero en prioridad estratégica y facilitar un marco propicio para la inversión extranjera, en línea con otros acuerdos internacionales recientes. El ministro Petri, acompañado por altos funcionarios, insistió en la importancia de profundizar la formación conjunta y la modernización castrense, mientras fuentes oficiales reconocen que la adquisición de submarinos Scorpene sigue siendo un proyecto vigente aunque no prioritario por los costos implicados. Este renovado vínculo París-Buenos Aires demuestra cómo la Casa Rosada apuesta a consolidar su protagonismo global y diversificar sus socios estratégicos, articulando recursos naturales y defensa nacional en una agenda que marca un giro decisivo en la política exterior argentina. La alianza con Francia, en pleno auge, no solo posiciona a Argentina en el mapa internacional sino que también abre una puerta concreta para el desarrollo tecnológico y la atracción de capitales que pueden dinamizar sectores clave de la economía nacional. Diario NORTE HOY