El niño de siete años, Noah, quien sufrió quemaduras graves en gran parte de su cuerpo tras una explosión en un zanjón de General Pueyrredón al 1800, fue sometido a una nueva intervención quirúrgica en el Hospital Garrahan. Según informó Yamila, allegada a la familia, los médicos trabajaron sobre "el tórax, las piernas y la cara" del pequeño, utilizando injertos de su propio cuerpo para cubrir las zonas afectadas por el incendio. Durante la operación, los profesionales retiraron "grasa de la parte media" y "piel del muslo derecho" de Noah, aplicando un tratamiento diseñado para que los injertos crezcan y cubran la mayor superficie posible, explicó Yamila. La técnica aplicada permite tratar de manera adecuada las extensas quemaduras que afectan gran parte de la piel del niño. El brazo derecho mantiene piel sana y posiblemente no requerirá cobertura adicional, mientras que los médicos evaluarán los pasos necesarios para la intervención en la cara. "Hoy quirúrgicamente se avanzó un montón, Noah no presentó irregularidades, pero hay que esperar para ver cómo evoluciona. Que todos sigan orando por él", concluyó Yamila. La familia y los médicos del Hospital Garrahan siguen trabajando intensamente para garantizar la recuperación de Noah, mientras la comunidad acompaña con mensajes de apoyo y esperanza. Opinión pública: La evolución de Noah refleja el impacto positivo de la medicina especializada en quemaduras pediátricas y genera una ola de solidaridad, recordando la importancia de la prevención y la atención inmediata en este tipo de accidentes. NORTE HOY