La localidad de Pérez Millán enfrenta una creciente situación de malestar social debido a la falta de obras, mantenimiento y respuestas concretas por parte de las autoridades municipales de Ramallo. Los reclamos de los vecinos incluyen desde problemas de seguridad vial hasta la ausencia de servicios básicos en barrios enteros, el manejo deficiente de los residuos y el deterioro de la infraestructura pública. Uno de los puntos más críticos es la falta de iluminación en el cruce de la Ruta 51 y el acceso a La Violeta, utilizado diariamente por tránsito local y pesado vinculado a la actividad agrícola y al frigorífico de la zona. A pesar de que el Concejo Deliberante aprobó una resolución solicitando a Vialidad Provincial la reparación inmediata de la luminaria, el bloque oficialista decidió no acompañar el pedido. En respuesta, los concejales oficialistas argumentaron que el cruce corresponde a jurisdicción de Pergamino y señalaron que la gestión debería realizarse allí, apuntando incluso al intendente Javier Martínez como responsable del abandono de los vecinos de La Violeta. En paralelo, se logró aprobar la Ordenanza 7269/25, que autoriza al Ejecutivo municipal a ejecutar obras y servicios en las manzanas 4a y 4b de la histórica Quinta 4. La norma permitirá la apertura definitiva de las calles Manfredi y España, la creación de una nueva arteria interna llamada Juana Azurduy y la articulación con las prestatarias de servicios para garantizar infraestructura básica. Otro foco de preocupación es un predio utilizado como basural local. En las últimas semanas, varios incendios generaron densas nubes de humo tóxico que afectaron a la comunidad. Desde el Concejo Deliberante se solicitó la extinción de los focos de fuego, limpieza integral del lugar y cumplimiento de los recorridos de recolección de residuos. El malestar vecinal también se refleja en redes comunitarias, donde circulan denuncias sobre el deterioro de la sala de urgencias y la delegación municipal. Vecinos destacan condiciones insalubres, inundaciones, falta de ventilación y la ausencia de soluciones efectivas. Muchos sostienen que mientras otras localidades reciben fondos para pantallas led, festividades o dispositivos de seguridad, Pérez Millán continúa relegado en cuestiones esenciales. La situación genera una creciente tensión social y la comunidad espera respuestas concretas. Según la opinión de expertos en gestión municipal consultados por NORTE HOY, la demora en obras básicas y la disputa política entre jurisdicciones no solo afecta la seguridad y salud de los vecinos, sino que también erosiona la confianza en las autoridades locales. NORTE HOY