Un allanamiento que tenía como objetivo esclarecer un hecho de hurto terminó revelando una actividad mucho más grave. En la tarde de ayer, personal del Gabinete Criminológico de la Policía llevó a cabo un operativo en una vivienda de la calle Manuel Iglesias al 1600, donde no solo se recuperaron elementos robados, sino que además se hallaron drogas listas para su comercialización. La investigación se había iniciado días atrás, luego de que una vecina de 20 años denunciara el robo de su bicicleta. A partir de tareas de seguimiento y análisis, los efectivos lograron identificar al presunto autor, un hombre de 37 años, y solicitar al Juzgado de Garantías de San Nicolás una orden de allanamiento para su domicilio. Durante el procedimiento, si bien el sospechoso no se encontraba presente, los agentes incautaron la bicicleta denunciada —que había sido recientemente repintada— junto a otras dos unidades tipo mountain bike, de color negro y de dudosa procedencia. Sin embargo, el hallazgo más relevante se produjo al revisar el interior de la vivienda. Allí, la Policía encontró 16 envoltorios de cocaína y un trozo compacto de la misma sustancia, con un peso total de 24,8 gramos, además de una importante suma de dinero en efectivo. Ante esta evidencia, se procedió a la aprehensión de la moradora, una mujer de 37 años, acusada de tenencia ilegal de estupefacientes con fines de comercialización. La Fiscalía de San Pedro tomó intervención inmediata, disponiendo el secuestro de todos los elementos y la notificación de la causa a la detenida, quien permanece alojada en la dependencia policial a la espera de ser trasladada a sede judicial. El caso, que comenzó como una causa menor de hurto, terminó revelando una posible red de narcomenudeo en la zona, un problema que preocupa a las autoridades locales por su expansión en barrios residenciales. Redacción de Diario NORTE HOY
