El Municipio de Ramallo procedió a la clausura de la guardería náutica Puerto Ramallo, ubicada en la zona del puerto, tras constatar que no contaba con la habilitación correspondiente. La decisión se enmarca en un conflicto legal que se arrastra desde hace varios años y que implicó múltiples instancias administrativas y judiciales. Durante el último tramo de la gestión de Gustavo Perié, la concesión del galpón había vencido y el Ejecutivo municipal convocó a una licitación. Tres oferentes se presentaron, incluyendo quienes ya operaban en el lugar, pero ninguna propuesta convenció al gobierno local. Finalmente, el proceso fue declarado desierto, amparado en una cláusula de las bases, y se notificó a los titulares de la guardería que debían desalojar el espacio antes del 31 de marzo de 2024. Con la nueva gestión, la decisión se mantuvo. A pesar de intentos de llegar a un acuerdo consensuado, los responsables de la guardería presentaron un recurso judicial impugnando el decreto que dejó sin efecto la licitación, alegando ser los legítimos adjudicatarios. También solicitaron una medida cautelar para seguir operando mientras se resolvía el fondo del conflicto. Sin embargo, la jueza interviniente rechazó la solicitud y ordenó la desocupación del predio, fallo que luego fue ratificado por la Cámara. En paralelo, el municipio inició un juicio de desalojo que aún aguarda sentencia. Mientras tanto, avanzó con la clausura administrativa, fundamentando que los actuales ocupantes no son propietarios y que la habilitación comercial estaba vencida. Actualmente, las actuaciones quedaron en manos del Juzgado de Faltas, que definirá los próximos pasos respecto al uso del predio y las responsabilidades de los ocupantes. Esta situación genera preocupación en la comunidad náutica local, que observa con atención cómo se resolverá el futuro del galpón en la zona del puerto, mientras las instancias judiciales y administrativas continúan su curso. NORTE HOY